Empezar a forjar hoy un mundo mejor y más seguro para la comunidad LGBTIQIA+ es un proceso que requiere de pequeñas victorias.
POR LUNABELLA DE TURRIS
¿Es la sexualidad el amor que me tengo a mí mismo y mi forma de amar a otros? ¿Es cómo me siento hoy? ¿Es una etiqueta o categoría que la sociedad determina para poder identificarse fácilmente? ¿Por qué seguimos definiéndonos como mujer bisexual, mujer lesbiana, mujer trans, mujer hetero, hombre trans, hombre gay, hombre hetero, hombre bi y todas estas categorías? Si hoy me levanto queriendo a una mujer, si mañana me gustan los chicos, si dentro de un mes determiné que no me gusta ningún sexo. ¿Qué soy? ¿Quién soy?
Desde que somos niños, niñas o niñes, la sociedad, la educación y nuestras familias se encargan de mostrarnos quién podemos ser y qué podemos hacer. Pero, ¿qué pasa si no quiero ser como ellos dicen? Es necesario el cambio, es necesario que nos muestren la cantidad de oportunidades que tenemos para poder elegir quién somos hoy y quién somos mañana.
Pero no podemos obligar a los demás a enseñar eso. Es un proceso de adaptación. Así como los años cambian, la sociedad crece y la historia se transforma, la cultura también. Debemos tratarnos con respeto y sin violencia para poder marcar ese paso que tanto queremos dar. Obligar a alguien a educar así a sus hijos es como obligarte a vos a elegir y encasillarte en un solo sexo. "Sos esto porque naciste así".
Entiendo que a veces podemos pensarlo de otra forma. Uno puede sentir que es necesaria la etiqueta: para hacer diferencia, para decirle a los demás “yo soy así, vos no me vas a cambiar, yo soy _____”. Y de esta forma poder dejar nuestra marca en la sociedad. Pero, si no sé qué soy, quién soy... ¿Por qué debería? La sociedad sigue rígida, difícil de modular, como la porcelana fría. Hay que esperar un poco, darle calor para que poder moldearla como queremos. ¿Nos vamos a enojar por eso? No, cada uno va al paso que puede, como siente que está bien: en conjunto o solo, de la mano, abrazado, por impulso o con consciencia, pero siempre sabiendo lo que hace y por qué lo hace.
Yo creo que uno puede deconstruir con paciencia, empatía, respeto. Uno no nació sabiendo, todos nos educamos en diferentes familias. Nos determinamos por la que nos criamos. A veces la violencia que había en casa nos hizo esto o, por otro lado, la compasión de nuestros padres nos dejó elegir quién somos hoy. Existen muchas posibilidades por las cuales elegí ser como soy hoy. Pero... ¿Realmente seré así toda mi vida? ¿Me sentiré así toda mi vida? La verdad, no lo sé.
Desde mi experiencia, me atraen las mujeres, pero también me atraen los hombres, ¿Tuve que probar para saber que me gustaban ambos? No.
¿Por qué si una mujer quiere querer a otra mujer tiene que someterse a una relación o se ve obligada a tener contacto físico solamente para determinar cómo se siente? O, si fuera al revés, ¿por qué un hombre tiene que someterse a tener relaciones sexuales con una mujer si determinó que no se siente atraído al sexo femenino?
¿Por qué la sociedad nos obliga a semejante acto cuando a la vez determina que nosotros somos libres de elegir con quién estar, cuándo y cómo? Hoy soy quien soy, mañana capaz soy otra persona, me siento diferente... no sé.
Frente a semejante pandemia aprendí a querer diferente, a valorar otras cosas. ¿Es necesario catalogarme para que la sociedad se quede tranquila? Prefiero dejarlo en incógnita. Prefiero ser por cómo me sienta hoy y no ser para la tranquilidad de los demás.